CARLOS

Siento paz ahora que te tengo entre mis brazos.
Ha sido una larga espera, llena de dudas, llena de miedos.
Mi aire ahora es tu respirar.
Ya estás junto a nosotros.
Tu dulce carita me observa mientras yo no aparto mi vista de ti, mientras te entrego mi corazón para siempre.
Te esperábamos con ganas.
Me da igual lo que haya sufrido antes de tenerte conmigo, ahora te tengo aquí.
He soñado un millón de veces con este momento, he confiado en que todo saldría bien... Y por fin ha llegado.
Gracias por llenarme la cara de lágrimas de felicidad.
Ahora te toca conocer al resto, a tu hermana que tanto te espera y desea, y a todos los que por tí han sufrido.
Nos regalarás a todos tu presencia y compañía... Te entregaremos nuestro amor incondicional.
Bienvenido Carlos y gracias por existir.

Olas en calma...

Las olas se calman frente a mi.
El sol se va posando poco a poco.
La calma empieza a ganar la batalla.
La explosión de luz y color toma el terreno para posarse en el para siempre.
Las olas vuelven y se calman.
Las gaviotas revolotean en busca del puerto donde reposar.
El ruido cesa para dar paso al silencio de la noche.
Un silencio que te envuelve junto a las olas del mar.
Un silencio lleno de soledad.
Un silencio en calma.
Un silencio silenciado por los hechos.
Silencio de las olas en calma.