Una vez más persiguiendo esa quimera.
Otra vez vuelvo a toparme con la realidad, con lo que me avisaron, con lo que vi, con lo intuido y con lo ya vivido.
Otra vez las lágrimas, la decepción y la sensación de pérdida.
Otra vez más el silencio...
Pero por una vez aprendo, me hago fuerte.
Por una vez sé lo que quiero, y lo que no. Mi alma esta tranquila.
Mi sonrisa se queda en mi cara.
Nunca pienses que lo que entregas sinceramente cae al vacío, se olvida o desaparece.
Lo que entregas te hace grande, te hace mejor. Regalas sonrisas, esfuerzos, cariño, y sobretodo amor y pasión.
Seguiré con mi pasión inalterada, pues eso es lo que me permite respirar y seguir viviendo.
Mi corazón vive, mi corazón late y latirá.
No hay comentarios:
Publicar un comentario