Amores y tristezas

Quiero ser positiva a la vez que romántica.
Romanticismo sin tristeza, romanticismo sin dramas, romanticismo real. 
Intentar escribir sin pensar en historias tristes.
Dejar de imaginar tristes finales, tristes reencuentros, y plasmar realidades diarias.
Realidades felices, realidades a veces enturbiadas pero llenas de amor sincero, amor real, amor duradero y amor de verdad.
Dejemos el romanticismo dramático para las películas.
Pero, ¿creéis que vende el amor feliz?
No veo poesía en el amor alegre, veo poesía en historias tristes.